Estas hojaldrinas caseras no son exactamente iguales que las ínclitas hojaldrinas comerciales de la casa Mata, de las que mi parejo es devoto adorador. En Navidad acaba con todas las existencias. Esta receta en concreto procede de Los Dulces del Convento, recetario del monasterio de Santa María del Socorro de Sevilla, y de hecho a mí me gustan bastante más que las de la bolsa, que no las solía comer ni siquiera cuando podía comer cosas azucarosas.
Como decía, esta receta no es igual que la de las hojaldrinas Mata, casa que aparentemente hizo el primer dulce comercial que recibió este nombre, porque las hojaldrinas Mata se hacen con zumo de naranja, cosa que no lleva esta receta. Como líquido solo llevan vino amontillado… qué sabias son las monjas del Socorro. Si es que la clausura da para pensar y experimentar a tutiplén.
Como el amontillado blanco y dulce nunca lo encuentro por mi zona, las hago con lo que se me ocurre: oporto blanco, amontillado oscuro… El caso es que sea alcohólico. Seguro que las monjas me tacharían de hereje. Tengan caridad con un alma de cántaro.
- 250 g de manteca de cerdo ibérico
- 200 g de mantequilla buena
- 150 ml de vino blanco amontillado (dulce)
- 550-650 g de harina de repostería
- ½ vaina de vainilla (las semillas)
- ¼ cucharadita de sal
- Azúcar glas a cascoporro para rebozar
- Empezaremos por mezclar la manteca con la mantequilla, que deberán estar ambas a temperatura ambiente. Agregamos la sal y batimos hasta homogeneizar bien.
- Agregamos las semillas de la media vaina de vainilla o ½ cucharadita de extracto de vainilla, la sal, y mezclamos.
- Vertemos el vino y batimos todo bien hasta homogeneizar, más o menos.
- A continuación, tamizamos la harina sobre la crema obtenida. Primero agregamos los 550 g y después, si la masa no está suficientemente firme, seguimos añadiendo de cucharada en cucharada, al tiempo que mezclamos. La masa final debe ser muy blandita, pero apenas se debe pegar a los dedos.
- Cuando esté perfecta la envolvemos en plástico y la dejamos reposar un par de horas.
- Enharinamos bien la encimera y extendemos la masa con rodillo hasta un grosor de 1 cm. Con un cuchillo o un cortapizzas vamos cortando tiras que dividiremos después en cuadraditos o rectángulos (1); también se pueden cortar en redondo como los mantecados.
- Ponemos las piezas sobre una bandeja de horno forrada con papel de hornear o una lámina plástica. Las refrigeramos mientras se calienta el horno.
- Calentamos el horno a 190º (sin aire) y horneamos las hojaldrinas en tandas, una media hora. Las sacamos a una rejilla a enfriar.
- Una vez estén bien frías las hojaldrinas, las rebozamos en un plato con azúcar glas y las guardamos en caja metálica.
Me gustaría saber el secreto del hojaldrado con la manteca, quiero decir, que muy habitualmente los dulces cuya masa lleva manteca salen ligeramente hojaldrados, aunque no hagas capas en el amasado. Supongo que se debe sencillamente a que la manteca de cerdo no se llega a mezclar del todo con la harina, pero no he encontrado nada concreto al respecto en ningún libro ni sitio web. Si alguien conoce esta importante cuestión, que me dé un silbidito.
¿Más dulcecillos navideños?
Si queréis un regalo artesano para hacer estas Navidades o algo especial que servir en vuestras comilonas navideñas, os aconsejo estas hojaldrinas caseras, porque son fáciles y tienen un gusto fetén. Os ganaréis a vuestros invitados, lo digo por propia experiencia. Luego ya podréis pasar a pedirles favores de todo tipo.
La entrada Hojaldrinas caseras es original de El Invitado de Invierno.