Esta receta de tarta de queso sin horno es un poquito distinta de la más clásica, porque se hace con queso mascarpone. Tenía un mascarpone casero excelente hecho con buena nata y busca, buscando di con una interesante receta de BBC Good Food (buena comida de la BBC, sin ironías) y la tuneé a mi gusto, con una base crudivegana sin azúcar que uso en todas mis tartas sin horno… ¿queréis saber cómo es? Seguid leyendo ;).
Para quien no lo sepa, esto del crudiveganismo consiste en comerlo todo crudo, no se come nada cocinado… Suena difícil y lo es, pero esta dieta tiene ideas curiosas y muy aprovechables por todos los públicos, como la de esta base de tarta. Pero no penéis, que también os doy una receta de base tradicional, de galletas y etc. Yo soy así.
En lugar de coronar la tarta de queso con la consabida mermelada rojiza, le puse una salsurria ad hoc de ciruelas claudias, que estamos en temporada. Pero le va bien casi cualquier cosa, ciertamente.
Esta tarta de queso sin horno tiene la ventaja… a ver si adivináis… ¡correcto! Se hace sin horno, ejem. Por eso es una tarta fácil y relativamente rápida, no tengo ni que decirlo (pero lo digo, qué pelma soy). Y a los que no tengáis un horno fiable os vendrá de miedo; además, también es apta para muñones y novatos en esto de la cocina. No me lo agradezcáis.
Image may be NSFW.
Clik here to view.
Clik here to view.

- 90 g de frutos secos sin tostar (nueces, almendras, anacardos sin sal, etc.)
- 100 g de fruta seca (dátiles, orejones, ciruelas pasas, etc.)
- 2 cucharadas de mantequilla derretida (o la misma cantidad de aceite de coco que es lo que usan los crudiveganos**)
- 1 pizco de sal
- 100 g de bizcochos de soletilla o sobaos
- 100 g de almendrados
- 75 g de mantequilla derretida
- 400 g de queso crema
- 300 g de queso mascarpone
- 200 g de azúcar glas (o 100 g de tagatosa *)
- 1 cdta. de extracto de vainilla
- 5 g de gelatina neutra
- 70 ml de agua
- 10 ciruelas claudias
- Azúcar o endulzante al gusto
- 1 chorrito de agua
- Trituramos los frutos secos hasta que no queden pedazos grandes, con cuidado de no pasarse.
- Agregamos a la trituradora la sal y la fruta seca cortada en pedazos y trituramos todo junto hasta que se empaste. Añadimos la mantequilla y mezclamos bien.
- Preparamos un molde redondo de 20 cm, con base desmontable, forrando la base con papel de hornear. Podemos untar el lateral también con algo de mantequilla o aceite de coco.
- Image may be NSFW.
Clik here to view. - Pasamos la mezcla de frutos y frutas secas al molde y apretamos para amalgamar e igualar y que nos quede una base de tarta superbonita y fetén. La metemos en el frigorífico un buen rato para que se compacte.
- Trituramos o hacemos migas los bizcochos y los almendrados. Agregamos la mantequilla derretida y mezclamos bien.
- Al igual que en el caso anterior, distribuimos las migas sobre la base del molde y compactamos con los dedos. La metemos en la nevera para que solidifique bien la mantequilla.
- Ponemos la gelatina en el agua a que se hidrate.
- Mientras tanto ponemos los quesos con el extracto de vainilla y el azúcar u otro endulzante en una batidora y batimos a conciencia.
- Cuando esté la gelatina hidratada la metemos 9-10 segundos en el microondas a potencia máxima, para que se disuelva. Removemos un poco con una cucharilla y agregamos la gelatina al bol de la batidora. Batimos para homogeneizar.
- Image may be NSFW.
Clik here to view. - Sacamos el molde del frigo y untamos un poco las paredes con mantequilla o aceite de coco. Vertemos la mezcla de queso y la distribuimos bien con una espátula, intentando que no queden huecos, sobre todo junto a la pared del molde.
- Alisamos la superficie con la propia espátula o con un rascador. Metemos otra vez la tarta en la nevera para que se solidifique el relleno, por lo menos cuatro horas.
- Image may be NSFW.
Clik here to view.
- Cortamos las ciruelas en dos partes para quitarles el hueso. Las ponemos en un cazo con el chorrito de agua y el azúcar o endulzante a nuestro gusto. Las cocemos un ratito, según veamos, hasta que se ablande y suelten el jugo.
- Pasamos por batidora y después por un pasapurés para quitar las pieles y fibras. Ajustamos de azúcar y de líquido y reservamos hasta que se enfríe.
- Cuando la tarta esté bien firme y refrigerada, la desmoldamos. Si al aflojar el lateral del molde vemos que está pegada, pasaremos un cuchillo afilado con cuidado entre la tarta y la pared del molde. Para evitar que se pegue el lateral podemos poner una banda de papel de hornear antes de verter la mezcla de queso.
- Aplicamos la salsa de ciruelas por encima con una cuchara y a la mesa.
Si usamos cualquier edulcorante distinto del azúcar tendremos que triturarlo para hacerlo glas; no se puede añadir ningún endulzante granulado, ya que notaríamos el granillo en la tarta.
** El aceite de coco tiene un sabor relativamente intenso que se puede percibir en exceso, así que cuidado con él.
La base de la tarta debe quedar finita por una razón: para que el sabor de las frutas secas no domine. Así que si os queda demasiado gruesa podéis quitar algo de la mezcla. La base no queda excesivamente firme, a no ser que le pongamos más mantequilla, por lo que hay que ser cuidadosos si pasamos la tarta de la base del molde a una fuente.
Image may be NSFW.
Clik here to view.
Esta tarta de queso sin horno es cremosa, nada pesada y con el puntito de sabor del queso mascarpone, que está tan rico… Estas tartas van muy bien con frutas rojas, es bien sabido, así que una salsita de cerezas deshuesadas o de frambuesas con algo de licor les va al pelo. Entonces no aconsejaría usar orejones en la base, sino otra cosa un poco más neutra, como los dátiles.